IV

Fecha: 8 de diciembre de 2014 Categoría: Pasa-Tiempo Comentarios: 0

Le digo lo que quiero: un reloj de pulsera en negro, con un cierto brillo metálico en su carátuila. La imagen que debe proyectar es algo industrial, sin llegar a lo burdo. «Industrial chic», podríamos decir, o incluso «industrial nice» (perdón por la simpleza pero no encuentro otra forma de expresarlo). Mi idea es que ese panorama industrial («chic» o «nice») se perfeccione con ciertos detalles, como botones, ranuras, pequeñas celdas y en general motivos que hagan una referencia al modelo industrial (sin perder lo «chic» o lo «nice» y de nuevo me disculpo por la vulgaridad pero sigo sin encontrar cómo expresarlo de mejor forma). No estaría mal, incluso, que al visualizar el conjunto la mente del observador casual asocie la imagen del reloj con la grasa y el aceite, es decir, con esa referencia íntima, casi arquetipo, de un modelo industrial o un taller, si se quiere, guardado en nuestra mente desde las primeras edades (por lo menos desde la mía, pues debo confesarle que mi padre era ingeniero y mi niñez pasó entre esos aceitosos parajes donde los fierros viejos se acumulan).

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